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Como en muchos pueblos, las gentes de cada localidad se conocen entre ellos, no por apellidos, sino por apodos o motes, que han heredado de sus progenitores, o de los progenitores de sus progenitores y así sucesivamente...

Se puede apreciar en esta lista de motes y apodos que los hay de todo tipo, como los relacionados con los lugares, como puede ser Andaluz, Murciano, Gallurero; otros son con motivo de profesión o actividad como puede ser Lechero, Lucero; también los hay que se inspiran en características de la persona apodada como puede ser Cristiano; y también otros que dan reflejo de la fisonomía como Chato.

Como véis estamos recopilando Apodos, mándanos el tuyo y dinos por qué te lo dicen. Esther la Saltamontas nos manda unos cuantos. 

Aquí están algunos de los motes que en Mallén se dicen,
no con él animo de ofender sino a sus gentes conocer,
pues todos ellos son parte de la historia de mi pueblo
y nunca debemos olvidar de donde venimos.

Desde niña siempre tuve curiosidad
de por qué Saltamontes a mi abuelo le decían,
por qué a todas su gentes
en este buen pueblo motes les ponían.

Un día en el campo estaba
con el tío Pegote trabajando
y como el que no quiere la cosa
de dos en dos las caballerizas iba saltando.

Asombrando el tío Pegote se debió quedar
de los saltos que daba mi abuelo
pues a partir de ese día como
el  tío Saltamontes le iban a bautizar.

No solo saltamontes tenemos
que también hay Caparranas
que siempre que iba al campo le salían
con la misma sonaja "¿Ande vassss?"
Y  un buien día " A capar ranas" decidió contestar
y con ese mote se tuvo que quedar.

Poño de la fabla aragonesa viene,
personaje gracioso y nervioso es.
Y así  el hombre debía ser,
pues ese mote le quisieron poner.

Muchos han heredado como mote
el nombre de algún abuelo.
Así tenemos a los Gabinos,
los Francisquitos y los Petrillos,
y a los Frutos y Triburcios.

En el molino de aceite
de mayoral trabajaba.
Buen trabajo debía ser
pues Mayorales los llaman.

Avisador de agua era
y buen día una manga de agua
dijo que venia.
Cuanta gracia les haría
que Manga lo llamarían.

También tenemos Murcianos,
Andaluces y Extremeños,
pues en Mallén somos buena gente
y no hay nadie foráneo.

De los oficios también
motes han quedado.
Así tenemos los Choriceros
y a los Pescateros,
a los Esquiladores y Enterradores.

Aunque de sangre era Cascabel
otro apodo le sacaron,
pues era mucho lo que hablaba
y Cotorro lo llamaron.

En la Marga trabajaba
y que harto estaba
que un día dijo
que iba arder hasta Maria Santísima.
Y por esos tenemos en Mallén
a los Santismas.

No tiene mucho misterio
porque a los Pavos así los llaman,
pues su abuela vendía pavos.
Al igual que los Laneros
que estos vendían mantas.

También tenemos a los Zarras
que por este futbolista
su abuelo tenia pasión,
y el decir que pariente suyo era
este mote le valió.

Muchos Chatos hay en Mallén
y no sé si a todos por lo mismo se lo diran,
pero a uno de ellos un bulto en la nariz le salió
y con buen criterio el medico se lo quiso quitar.
Que tajo le daría que sin nariz se quedó.
A partir de entonces Chato se le llamó.

Afición tenia a jugar a las cartas
y cuando un rey le salía
tanto se emocionaba
que cuando a la mesa lo tiraba
esto decía:
“Ahí va el general Sanjurgo".
Muchos reyes le debían de salir
pues con el Sanjurgo tuvo que vivir.

Hace tiempo en Mallén
buen paloteado había
y un diablo salía.
Y al que ese papel hacia
como el Diablo se le conocía.

No sabia por qué el cura del pueblo
no le quería casar,
y de mal genio le dijo que lo iba a matar.
Pero cual seria su sorpresa
que al día siguiente el cura muerto apareció,
y  el Matacuras el pueblo lo llamó.

"Vaya campo tiene ese cabronazo”
“Vaya panizo le ha salido a este cabronazo”
Tal era la afición de este buen hombre a esta palabra
que era más fácil conocerlo por el Cabronazo
que por el nombre de pila que le pusieron.

Algunos por los de Estanis los conocen
pues Estanislao era el nombre del abuelo
para qué iban a pensar más en este pueblo.
polo lo llamaba su madre, polo lo llamaba su padre,
y Polos tenemos en Mallén
que todos conocemos muy bien.

A Mallén llegaron de pueblos cercanos
y para conocerlos con su gentilicio se quedaron,
por eso hay Novilleros y Borjanos.

Muchos apodos no vienen de lejos
como es el de los Ninos,
pues así los llamamos
aunque Segura sean de apellido,
pues con nombre del hermano mayor
conocemos a todos los hermanos que son un montón.

Un taller de chapa tenía
y como su nombre no sabían
como el de las Chapas lo conocían.

En Mallén tenemos Cantinas
y no es porque mucho beban,
sino porque a su antepasado
mucho le gustaba estar en la cantina.

Y como no somos racistas en Mallén
que aunque no son de ese color
Negros
tenemos también,
pues moreno oscuro el abuelo debía ser.

Con un bar empezó, luego una tienda fue
y muchos oficios probó
y como Probatinas se le dio a conocer.

Tanto le gustaba llevar mandarras
que nunca se la quitaba
como el Mandarra se le conocía.

Con una piedra grande tropezó
y como en fabla a esas piedras zaborras se llaman,
el que con la zaborra se dio
Zaborro
se le conoció.

Añavieja, un pueblo de Soria es
y los que de allí llegaron a Mallén
como Añaviejas se dieron a conocer.

Nadie la tajadera podía mover
y llego un hombre con grandes manos
y dijo que él con sus manazas lo iba hacer
y Manazas lo apodaron porque que así fue.

No me quiero dejar a los Toyos
pues de una abuela suya le viene el apodo.
Auritoya se llamaba la buena mujer,
vaya nombre le fueron a poner
y abreviando el nombre por Toya de le dio a conocer.

Así le pasa a los Beneritos
pues Benedicto se llamaba el hombre,
y como en este pueblo no lo sabían llamar
el nombre le decidieron cambiar.

Por la parte que me toca no me puedo dejar
a los llamados Gomas (pues con uno estoy casada).
Malo cayó el abuelo y con fiebre estuvo en cama.
Mucho tiempo pasó hasta que le dieron el alta,
y cúal seria la sorpresa de todos al verlo cuando se levantó,
había crecido tanto que dijeron que como la goma se estiro.

Antiguamente colchones de lana había
y varearlos se hacia cuando uno mucho dormía.
Para esos menesteres estaban los Pelaires
que huecos y como nuevos los colchones nos ponían.

Y a uno de Mallén un injerto le hicieron
le cogieron la carne del culo
y en la mano se la pusieron.
Con lo que no contaron los galenos
fue con que ese injerto siguió creciendo.
Por eso en Mallén a Manoculo tenemos.

Tener un tío cura de mucho postín era
y muy finas sus sobrinas eran,
pues en vez de decir que tenían un tío cura
en la familia un Curita tenían.

Cuando alguien moría
enseguida los amortajaban
y todo el pueblo al velatorio acudía.
Pues vaya susto se pegaron,
los que en el velatorio había
al ver “resucitar al muerto” , pues aun vivía.
Y de mote Mortajao el pueblo le pondría.

Le gustaba jugar al frontón en la plaza
y cuando calor tenia, en camiseta se quedaba.
Y el que no sabia como se llamaba
Camiseta
le decía.

Por ponerle a un perro en la cola
cuatro latas de nada,
le pusieron a él un mote
que el de Latas se trataba.

Es curioso porque a los Pechamanes así los llaman,
pues un bisabuelo suyo muy mal hablaba
cuando alguno veía que mal pisaba.
Siempre le decía "Ése pechaman”
en vez de decir que pisa mal.

Con respeto y cariño me despido
esperando que este tributo a nuestros antepasados
os haya gustado.
Le pido mil perdones y si alguno he molestado.

 ESTHER “la Saltamontas”

© Asociación Cultural Belsinon 2002-2009